I.- Antecedentes generales:
1) Desde fines de 2019, una vez iniciadas las marchas del primer rechazo (rechazo de entrada), me llamó la atención la aparición de los primeros carteles y pancartas con la leyenda: “No más ONU”. Debo reconocer que hasta ese momento no conocía la paranoia “onunista, globalista”, que con el correr del tiempo embargaría a la derecha más dura. En ese mismo periodo aparecieron los primeros videos del “señor del campo” intentando instalar la idea de la revolución molecular disipada, la cual generó muy pocos adeptos.
2) Convengamos en que en la derecha tradicional tienden a no ser extremos, y, por consiguiente, intentan buscar soluciones económicamente ventajosas para ese sector, y, al mismo tiempo, persiguen limitar las intentonas y desmadres de la izquierda radical. Si lo vemos de esa manera, buscan unir lo útil con lo agradable.
3) Siguiendo la misma línea argumentativa, en la derecha dura existe la creencia que el colegio debería educar e instruir; no obstante, si fuéramos la mitad de honestos que decimos ser, la educación y la formación se dan en la casa y la desarrollan los padres, mientras que la instrucción la desarrolla el colegio.
4) Hacia mediados del 2020, comenzaron los audio/videos del Comandante (R) don Patricio Quilhot, los cuales pusieron paños fríos a las teorías conspirativas que campeaban en la extrema derecha chilena, y trajeron cordura a los análisis.
II.- Conclusión:
Si consideramos que tras la salida del aire de don Patricio, lamentablemente, volvió el desmadre conspirativo “onunista, globalista”, y la tan valorada sensatez que, de una u otra manera, impuso el sr. Comandante con sus audios, se esfumó.
Visto así, hoy somos bombardeados a diario por toda una serie de personajes sin los conocimientos, ni la experiencia de vida necesaria. Pensemos que la mayoría de los influencers de YouTube y Tiktok son personas entre los 20 y los 40 años, incapaces de limpiarse la nariz solos.
En definitiva, la nueva derecha (juvenil) nos hace caer en los mismos errores de la izquierda frenteamplista.
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